jueves, 15 de marzo de 2012

Nublado

Mi cabeza no deja de pensar, nunca descansa y no sé si eso es bueno o malo. Hay veces en las que actúa sin pensar, momentos en los que no sé ni lo que digo ni lo que hago. Momentos en los que se estropea todo y no hay vuelta atrás.

¿Hay alguien por esta sala que actúe sin pensar? ¿Que no le deje de dar vueltas y vueltas a las cosas? Me parece que muy pocos de quiénes estén viendo esto estarán ahora mismo pensando si sus actos o si aquellos actos que deberían o no hacer pueden ser o son buenos o malos. O incluso pensar que si al poner esta entrada me pasa algo. Y no, no me pasa nada, sólo estoy reflexionando. Gracias.

Hay situaciones en las que ya tengo todo asumido. Pienso que es mejor no hacer nada para dejar las cosas como están, ya que si intervengo creo que será peor. Cuando intento remediar las cosas, a veces pienso que  mi opinión no sirve para nada. Lo mejor en muchos casos es quedarse calladita y dejar de las cosas pasen, y punto.

La mayoría de las veces tengo mi mente nublada. No tengo bastante con la vista, con ver borroso el mundo, sino también lo que pienso y veo. Ya mismo acabaré siendo un caos andante, ya veréis.

1 comentario:

  1. Anabel Álvarez Rodriguez27 de marzo de 2012, 13:19

    Permite que esta casi-cuarentona se cuele un rato en tu blog y te de su opinión general sobre lo que cuentas.

    Veo que dices que borraste este blog. No sé qué pasaría, pero puedo hacerme una idea: posiblemente un hijo de puta te jodió bien jodida. Pero mirando las entradas que dejas, eso que dices de querer encontrar amor, y a la vez negar quererlo, me preocupo. Dices, que hay una persona que te sigue. ¿Ese es el hijo de puta que te dañó? No lo sé, sólo puedo especular, dices que lo dañaste y tienes miedo de volver a hacerlo. Pero si él te dañó antes, y encima no hace nada por ti, haces bien en ignorarle. Otra cuestión diferente sería si lo rechazas por solo miedo, sin que haya nada malo.

    Te digo esto, porque pasé por algo similar, y no quiero que cometas mis errores. Pensé que las cosas no podían cambiar en absoluto, pero en mi caso fue por mi culpa absoluta, por no poner nada de mi parte. Decidí intentar pasar de todo, y estuve años pasando de ello. Al final me di cuenta de que todo lo que me comía la cabeza era el negar que alguien genial quería estar en mi vida, y de lo único que me arrepiento es de haberle dejado una vez. Ahora, me siento genial, no pienso dejarlo. Esa es mi situación.

    Deja de nublarte la cabeza, porque estoy segura de que las amistades falsas no te dañarán, que encontrarás algo que hacer con tu vida, y que esa persona genial a la que puedes amar, que no te mienta, se preocupe, te perdone, y todas esas cosas, aparecerá alguna vez si no lo ha hecho ya.

    Si yo con lo odiosa que soy lo he logrado, tú podrás. Ya lo verás.

    ResponderEliminar